Es decir que a veces nos cuesta soltar a los niños, estamos continuamente pendientes de ellos, analizando todo lo que hacen y realmente tenemos que aprender a veces a "soltarlos" a no hacer nada y dejar fluir las cosas.
Charlotte Mason tenía para este "soltar y dejar fluir" una expresión muy adecuada: "Masterly inactivity" que el google traduce como "magistral inactividad". ¿Y eso qué es????
A veces como madres o padres homeschoolers tenemos la tendencia de preparar de todo, buscar de todo, ofrecer de todo y de esta manera podríamos ahogar a los niños y agotarnos también a nosotros mismos.
La "magistral inactividad" se trata de
- magistral: tú como madre o padre tienes el control y la autoridad. Eres el maestro. No es "dejarlos sueltos y que se busquen la vida", sino que es dejar un espacio controlado dentro de unos límites. Estos límites los determinas tú para tu familia.
- inactividad: o sea que, no hacer nada, dejar que hagan ellos sus pasos, dejar espacio para que exploren, aprendan y crezcan dentro de los límites "magistrales" que mencionamos antes.
Si nos basáramos solamente en la parte de ser "maestro" y si lo queremos controlar todo, estipular todo, o organizar todo...... a parte de volvernos locos nosotros mismos y los niños, no dejaríamos iniciativa a los niños a que busquen su propio camino, sus propios intereses, o a que tomen sus propias decisiones.
Pero si nos dedicaríamos solamente a la parte de "inactividad", las autoridades podrían tener razón y hablaríamos de abandono. Los padres no hacen nada y dejan todo a la decisión de los niños. Los niños hacen lo que les de la gana y podría ser que aprendan poco.
Por esto va junto: Magistral Inactividad.
Me recuerda un poco a lo que dijo Ipe un vez en un comentario a mi post sobre ¿Programar o no programar?, es decir: preparar para improvisar. Esta es nuestra tarea como padres creo.
Creo que esta magistral inactividad a la que se refiere Charlotte Mason va muy liado con estar siempre preparando para poder improvisar a todas horas. Tú preparas y los niños te guían por dónde tienes que ir improvisando. Tú no haces nada "estas en inactividad" pero no dejas de estar pendiente y si no surge nada puedes ir proponiendo (magistralmente) para volver a la inactividad.
Además va en este orden: magistral va antes de la inactividad. No puedes improvisar adecuadamente si no te has preparado adecuadamente. Primero viene la preparación y después la capacidad para improvisar o dejar hacer.
PD. Muchos argumentos de esta reflexión las he sacado del texto "Masterly Inactivity with Charlotte Mason" de Sonya Shafer.
2 comentarios:
Excelente reflexión. Me encanta sentirme en compañía y no la única loca por esta mujer que tanto nos enseña.
En las edades tempranas, esta magistral inactividad se puede pensar en el ejemplo de la madre que está fuera en un patio, o en un parque, o bosque, con los niños, que no está como ahora es moda en estas actividades dirigidas para los niños que van de la estación de las burbujas, a la estación de saltar a la cuerda, o bombardeando con cosas como "mira esto es tal y cual", o mandándoles que hagan, que miren, que repitan... CM se oponía muchísimo a esto, pensaba que la madre está en el fondo, camuflada dijéramos con el paisaje, a su aire, con su libro o sus propios pensamientos pero alerta, mientras el niño explora, observa, ríe, salta, pero estamos ahí por si nos vienen con un bichito a compartir lo encontrado, o cuando juegan con amigos uno está también en la "sombra", pero con la "antena", que no de espía, sino simplemente accesible, por si hay cualquier situación que requiera de un adulto.
En cuanto al día a día, el método de CM requiere de planeación, pero no de planes al minuto, o rígidos, porque no sabemos donde la narración y los niños nos van a llevar, pero sí requiere de preparación del lado de la madre, que a la par que aprende ella planea ese banquete de ideas, y lo bello es eso, el no saber qué es lo que va a germinar en sus mentes, o por donde nos llevará el siguiente camino que van a tomar los hijos. Para mí esto es lo mejor, ver dónde me llevan mis hijas, y planear me encanta, no es tedioso, bien al contrario es buscar libros, pensar paseos, sacar acuarelas para dibujar lo que nos guste, buscar música, leer un poquito de poesía cada día, estudiar juntas las Escrituras, conversar...
Lo otro que cuentas el estar encima de ellos todo el rato es lo que te quema, lo que aburre, y lo que mata la curiosidad, además es hiperactividad, ¿no? o busy work que lo llamamos en inglés, cuando están ocupados en proyectos y actividades que son escogidas por el adulto y que tarda uno más en preparar que ellos en completar, y que no tienen profundidad ni conexiones. Por eso CM se oponía a Montessori (que no a los materiales actuales tan estupendos para mates, etc), sino a la idea de tenerlos ocupados "sensorialmente" sin más ni más.
Cuando daba clase eso es lo que me decían, que querían entrar y ver a los niños "haciendo algo". Y claro que con CM hacen algo, pero viene de ellos de dentro hacia afuera, en lugar de externamente dirigido y diseñado por el maestro. De ahí también que CM no guste de los llamados "estudios por temas o unidades", si están concebidos artificialmente por el maestro. En vez de eso, ella propone nutrir con ideas porque sabe que el niño es el que construirá su propio pathos o camino del conocimiento.
Gracias Silvia,
se ve que somos compañeras de "ruta" ;). Por cierto, me ha gustado esto de "antenas" pero "espias" no. Me costará ahora con mi hijo mayor entrando en la adolescencia. No aceptará "espias" y tendré que pensaren esto: sólo antenas...... ;)
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