Los nuevos gustos musicales de mi hijo mayor me han hecho pensar estos días bastante sobre cual es realmente la influencia de la educación en nuestros hijos.
A ver si me explico.
Mis hijos han crecido
con música clásica a través de diferentes proyectos del músico de la semana o del mes, al estilo Charlotte Mason, saboreando el músico. También han escuchado
opera y en mi casa nunca se ha puesto ni la radio ni la tele. Han tenido música clásica, canciones melódicas o simplemente el silencio. Cada uno ha estudiado su instrumento (saxo y piano) y en el coche he perdido el control de la radio hace solo dos años más o menos. Antes teníamos también música clásica o sobre todo audiocuentos o mirando el paisaje. Nada de radio o música al azar.......
Finalmente mi hijo mayor ha desarrollado un gusto por la música
clásica y toca el violín y canta ópera y disfrutamos todos de una música melódica y harmoniosa en casa.
Ups, se me fue un poco el pensamiento......
Finalmente mi hijo mayor ha desarrollado un gusto por la música que ha evolucionado desde
Lady Gaga a los 14 años (que no sé de dónde la sacó..... demasiada socialización diría yo...... ) hasta la EDM (Electronic Dance Music) con 16 años. Su favorito es
Martin Garrix.
Vamos, más chumba chumba, casi imposible.
Aunque debo de reconocer que hay ciertos trozos de esta música que hasta a veces suenan bien y tiene razón que según cómo, no suena mal......pero aún así.... me pregunto ¿¿Dónde está Bach???
El otro día cuando me puso su música se lo pregunté ¿Y dónde está Bach?
Y me contesta en plan adolescente: no sé, ¿no estaba muerto?
Yo:
Se ha lanzado muy fuerte. Está componiendo
sus propias canciones y quiere dedicarse. Dice que se va a sacar el título para tener algo en la mano, pero que se quiere dedicar a la música. Si hubiera algo que yo pensaba que mi hijo iba a hacer de mayor, desde luego, la música era lo último que había pensado yo.
El problema no está en que se dedique a la música o no. A mi sinceramente me da igual, y lo digo en serio de verdad. Ni tampoco está en el hecho de que yo nunca vi un músico en él y que me sorprendería muchísimo si finalmente se dedicara a la música y que hubiera tenido yo una "visión equivocada de él". Nada de esto realmente me importa, tiene 16 años, y tal como ha cambiado ya varias veces, puede cambiar más veces, y si sigue así, tampoco me parece mal.
Sino que mi reflexión me viene de ¿Qué papel realmente jugamos los padres en la educación de nuestros hijos? ¿Qué influencia real tenemos en el resultado de cómo serán finalmente? ¿Ha servido de algo Bach y Mozart? Si le hubiera puesto sevillanas ¿hubiera cambiado algo su gusto por la música? ¿Tenemos realmente la fuerza para cambiar o dirigir los gustos de nuestros hijos o vienen predeterminados y punto? Si vienen predeterminados ¿De qué sirve hacer nada? Si no vienen predeterminados y podemos influir ¿Dónde está Bach?
Y estoy viendo esta evolución no solamente en la música, aunque quizás ha sido para mí lo más chocante y lo más "contradictorio" digamos. Pero lo veo en otras muchas cosas donde me pregunto ¿Esto sale así por lo que hicimos? ¿Por lo que no hicimos? ¿Tuvo algo que ver lo que hicimos todos estos años?? ¿Vino así de fábrica?
Ya escribí algo una vez sobre
cómo puede costar respetar ciertos intereses de los hijos cuando van en contra de nuestros propios.
Y me viene la pregunta si realmente podemos hacer algo para que un niño, un joven, un adulto sea así o asá. ¿Cuál es realmente la influencia del entorno y la educación? ¿podemos o incluso ¿debemos? hacer algo en contra de ciertos intereses que no nos convencen?
La música es inocente, ya lo sé, y da lo mismo si hace más ruido o menos, pero hay otras cosas a veces más profundas, como por ejemplo el interés en las armas.
¿Y al revés? ¿podemos conseguir que le interese algo que no le interesa en absoluto pero que nosotros creemos necesario? ¿o es una tarea imposible?
Como en mi hijo menor, que no le gusta leer, ¿He tenido yo en algún momento la más mínima posibilidad de conseguir que le gustara la lectura? o ¿es que simplemente nació predeterminado para que no le gustara la lectura y podría yo ya recitarle Shakespeare en verso a todas horas desde pequeño, no lo hubiera conseguido nunca?
Dicen que si lees en voz alta a tus hijos, si lees tu mismo y si tienes muchos libros en casa, los niños acaban con un gusto por la lectura..... yo he visto que esto aún cumpliendo todas las normas.... no pasa. Como tampoco ha pasado que poniendo Bach y músca clásica acaban con un gusto por la música clásica.......
¿Sirve de algo hagamos lo que hagamos??
Yo estoy convencida de que sí sirve, pero me quedo dudando dónde sirve y en qué proporción.....¿¿?? Y ¿qué es realmente importante de esta educación? Yo veo que no es ni Bach ni Shakespeare..... tiene que ser otra cosa que hace que aún sin Bach y sin Shakespeare hace que estoy super orgullosa de los adolescentes que tengo ;).