¿Cómo des-escolarizar? 5

Hacer-te un proyecto.

Una cosa muy interesante para hacer durante todo este proceso para decidirse, es hacerse una libreta o una carpeta donde apuntar o guardar toda la información, dudas a resolver, respuestas a preguntas......etc....

Si vas leyendo libros, blogs, metodologías etc... se te irán ocurriendo todo tipo de cosas y va bien apuntarlos todos juntos en un mismo sitio.

Yo me hice una libreta con el título: “proyecto Educar en Casa”.

En esta libreta tenía varios apartados:

Presupuesto: en el cual había hecho todo tipo de cálculos de posibles gastos e ingresos. 

Ideas de actividades: Seguramente en todo este proceso de decidir, ya se te ocurrirán muchas cosas para hacer con los niños. Va bien apuntarlos para visualizar tu proyecto, para ver qué cosas se podrán hacer o para explicar a los niños qué actividades harán.

páginas web interesantes:

Horario: Yo me había hecho varios horarios posibles. Después no cumplí ninguno jejeje, pero creo que el hecho de estar pensando sobre posibles horarios, borrar y buscar otros, hizo que en el momento de la realidad ya tenía cierta agilidad y flexibilidad, ideas para hacerlo así o asá y no me encontraba en la situación de no saber por donde empezar. Yo tenía un plan para empezar y lo único que tuve que hacer era cambiarlo cuando vi que no funcionaba e ir probando otras maneras. Os puedo decir que puedes tardar un año o más hasta encontrar algo que funcione y lo más probable es que cuando finalmente funciona vendrá algún cambio en los intereses de los niños, las actividades extra-escolares o por la edad de los niños, que hará que otra vez tengas que cambiar. Pero esto es normal y es lo bueno de la EeF, siempre tienes la posibilidad de cambiar y adaptar. Si no funciona, cambia.

Comida: Pues sí, os puede parecer curioso, pero una de las cosas que a mi me preocupaba mucho cuando decidimos de des-escolarizar era la hora de comer al mediodía. Yo soy muy mala para cocinar, no me gusta nada y me entraba pánico pensar que tendría que cocinar para mis hijos cada día. Reflexioné, apunté ideas, busqué soluciones y antes de des-escolarizar ya tenía claro cómo me iba a organizar al mediodía. La cocina es un lugar ideal para mucho aprendizaje para los niños, pero si se convierte en estrés o si cada día se dedican 3 horas a cocinar, se pueden perder otras oportunidades de aprendizaje. Para mi fue una solución basarme en el menú del colegio. Mis hijo venían de un colegio con un menú bastante aburrido. Cada semana era lo mismo con variaciones mínimas. Lunes, arroz con tomate y tortilla con ensalada. Martes verdura y carne, miércoles sopa, pollo y patatas, jueves legumbres o pasta y hamburguesa, viernes pescado.

Y yo pensé, por muy mala cocinera que sea, debo de saber hacer un arroz blanco, una tortilla, freír una salchicha y calentar unas lentejas.... ;).

Al final el tema de la comida ha sido mucho menos problema de lo que yo me esperaba. Mi marido nos deja sopas de verdura en el congelador, nos deja salsas de tomate para hacer con pasta, nos deja legumbres hechas y yo me espabilo friendo hamburguesas vegetarianas o salchichas de tofu. Incluso mi hijo mayor se ha puesto a cocinero.

Puede ser que tú tengas otro punto débil para la organización diaria y entonces va bien sentarse, apuntar el problema y las posibles soluciones para no tener que improvisar en el momento, o que aquel problema sencillo se convierta en un problema grande y os impide a hacer la EeF satisfactoriamente.

Actividades extra-escolares y su precio. Yo ya tenía hecho un “estudio” de las posibles actividades extra-escolares en la zona que querían hacer mis hijos. Sabía ya cuándo los tenía que apuntar y adónde ir para no encontrarse en septiembre con que ya no quedaban plazas o que el precio no se podía pagar al saber el precio. El niño se puede quedar muy decepcionado al ver que finalmente no pueda hacer la actividad que quería hacer.

Organización y limpieza de la casa. Si los niños están todo el día en casa ya no es tan obvio recoger, lavar, planchar, barrer etc.... entonces hay que buscar aliados que son los mismos niños. Hice un plan de qué tareas podrían hacer ellos, qué tareas haría yo y cuándo y también me permití el lujo de tener una persona que me ayuda un día a la semana. Si te lo puedes permitir en tu presupuesto, vale la pena, así sabes que al menos 1 vez a la semana alguien pasará una escoba por allí ;).

Algo que yo en su momento no apunté porque no existían o no los conocía, eran los grupos de encuentro de EeF. Cuando nosotros des-escolarizamos solamente había un grupo funcionando una vez al mes. (Al menos del que yo tenía conocimiento) Yo ya tenía claro que íbamos a ir cada mes y de allí salieron después nuevos grupos que ahora están funcionando. Pero con un solo grupo no me había hecho falta hacer un apartado en la libreta. Pero ahora sí que esto puede ser interesante. Se trata de buscar todos los grupos de reunión de EeF que hay en tu zona, a cuántos km están, qué día se hacen, qué edades de niños hay más o menos, qué características tiene la actividad o el grupo etc... y valorar en qué encuentros quieres participar para ver si encaja en vuestra rutina.

Cuanto más información se tenga recogida antes de des-escolarizar a los niños, más tiempo tendrás después para adaptar-te junto a ellos a vuestra "nueva vida" en el día que se quedan ya definitivamente en casa y no irás estresado buscando soluciones varias a cosas que se podían haber previsto (que de todas maneras, imprevistos, los habrá, pero de esta manera habrá menos). Estaremos relajados con cierto sentimiento de seguridad, y listos para cambiar donde sea todo aquello que finalmente teníamos planificado pero que no funciona. Creo que es importante tener claro que para la EeF todo lo que preparamos tiene que estar sujeto a aprobación por la práctica y tienes que estar dispuesto a borrar lo que sea que no funciona una vez puesto en marcha. Se trata de aplicar el método científico a todas horas: probar, comprobar y cambiar. No se trata de hacer un programa rígido y organizado que hay que seguir al pie de la letra porque lo planificamos así cuando los niños aún estaban en el colegio. Esta planificación, información o preparación tiene que ser una ayuda para estar preparada y tener lo menos imprevistos posibles, y quedarnos más tranquilos y seguros, pero en ningún momento se trata de preparar un programa para seguir y punto. Sino, justamente caeremos en el mismo error que el colegio y no se trata de traer el colegio a casa, sino de hacer NUESTRO proyecto y para cada uno será diferente.

Preparamos para improvisar tranquilamente ;). La EeF no se trata de lanzarse al vacío a ver qué pasa. Se trata de lanzarse a la aventura con una mochila llena de provisiones para cuando hagan falta. Te faltarán provisiones, pero encontrarás nuevas por el camino. Y otros finalmente no te servirán de nada. Puedes estar seguro que en el proyecto tocará borrar e improvisar. Pero improvisar con una base no es lo mismo que improvisar sin provisiones ;).