Este verano me compré un "Scrapboard".
Se trata de un plástico duro transparente en el que se puede meter cualquier hoja o página de cuaderno. Después se escribe encima con rotuladores de pizarra blanca.
Una vez acabado el ejercicio se borra fácilmente y se puede volver a utilizar para otra hoja.
Pensé que era una buena compra porque pocas veces les dejo escribir en los cuadernos a mis hijos. Siempre pienso que algún otro niño lo podrá aprovechar. Pero a veces es mucho más cómodo simplemente rellenar el cuadernillo.
Ahora lo podrán hacer sin problemas con este "nuevo" sistema.Al principio estaba bastante contenta con mi compra (que no había sido exactamente barata. 8 euros por un trozo de plástico no me parece barato.....) .
Pero después me dí cuenta de que se consigue exactamente el mismo efecto metiendo cualquier hoja en una funda de plástico de los de toda la vida.......... vaya........
Quizás este es un poquito mejor porque es más duro pero realmente no cambia tanto.
Así que si queréis re-aprovechar cuadernillos o libros para hermanos o otros niños, solo hay que poner la página en una funda de plástico y escribir con rotulador no permanente ;).
3 comentarios:
Muchas gracias por la idea.
Todo lo que sea reaprovechar me parece genial.
JO!!! nunca se me hubiera ocurrido! Es que yo incluso cuando en el cole mis alumnas me traen su libro completado con tinta para que les corrija aishhhh no puedo evitar observarles que por favor no escriban en tinta, que siempre alguien más puede usarlo!!. Y no siempre escribiendo suavecito con lápiz se logra luego borrar bien! Genial la idea.
Pues sí, todo lo que sea poder reaprovechar las cosas es bienvenido ;).
Gracias por comentar.
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